La pasión de Dasha Plesen por el arte microbiano comenzó cuando estudiaba arte y diseño.
Su idea inicial era crear una imagen microbiológica que mostrara todos los organismos con los que entramos en contacto a lo largo del día. Esto incluye todas las superficies de nuestros hogares y en nuestras relaciones con los demás. Recoge microorganismos de su entorno, incluidos el aire y objetos cotidianos, a veces incluso de su propio cuerpo. Estos microorganismos se depositan en su lienzo nutritivo, normalmente en forma de placa de Petri.
El trabajo de Dasha se centra en el "proceso de siembra". Los hisopos se frotan en el medio y se dejan crecer libremente de dos a seis semanas. Un entorno controlado es la clave para un crecimiento óptimo. Es importante mantener las mismas temperaturas a las que crecerían naturalmente los organismos.
A medida que se deja crecer a los organismos, los resultados variarán en función de cómo interactúen entre sí y cómo reaccionen al medio los distintos microorganismos.